Dr. Fabián Jaksic, Premio Nacional de Ciencias Naturales 2018 en visita a la zona: Estudios de largo plazo para la comprensión de nuestro hábitat

A la izquierda, Dr. Fabián Jaksic, Premio Nacional de Ciencias Naturales 2018 y académico PUC, junto a Dr. Francisco Squeo, académico e investigador ULS-IEB-CEAZA. Ambos científicos han trabajo conjuntamente en estudios de ecología en la Región de Coquimbo.

El profesor de la Universidad Católica de Chile, Dr. Fabián Jaksic, se siente honrado por ser el primer ecólogo en Chile en recibir el Premio Nacional de Ciencias Naturales. A su juicio esto marca un reconocimiento importante para su área y los investigadores que la ejercen, que por años fueron conocidos por sus pares biólogos como los “abrazadores de árboles”, debido al constante trabajo de terreno que realizan.

En su carrera científica de más de 40 años, junto a otros colegas nacionales e internacionales, ha marcado hitos como ser uno de los iniciadores de los estudios de largo plazo en Chile, durante la década de los ochenta, lo que ha significado el análisis y entendimiento en profundidad de los efectos de eventos naturales como El Niño.

“En ecología existen sucesos que ocurren en períodos cortos, entre el día y la noche o entre meses. A partir de los años ochenta nos dimos cuenta que tener uno o dos años de estudios de estos eventos era muy poco, porque algunos de ellos tienen ciclos de una década, como El Niño. Si uno requiere comprender este tipo de situación natural debe al menos considerar 10 años de trabajo como punto de partida.“

Agrega que gracias a los estudios de largo plazo se ha podido entender que los ecosistemas resisten perturbaciones, pero no necesariamente a escalas cortas, por ello enfatiza en la necesidad de trabajos que abarquen lapsos prolongados.

“El interés que existe en este tipo de estudio es similar a la utilidad entre una cámara fotográfica, que toma una instantánea, y una de video, que registra continuamente y nos puede mostrar un período más extenso. Perfectamente, uno podría ir en un año La Niña y hacer un análisis del lugar y luego volver cuando se presente El Niño y hacer lo mismo, pero nos perderíamos todo lo que pasa entre medio”, ejemplifica el Dr. Jaksic.

Estructuras de gremio

El investigador, que cuenta con más de 300 publicaciones, ha trabajado por tres décadas en la Reserva Nacional Las Chinchillas, ubicada a unos 15 kilómetros al noreste de la ciudad de Illapel. Explica que en el sector se han podido estudiar las fluctuaciones poblaciones de roedores y numéricas de sus depredadores, sus estructuras gremiales, selección de presas, entre muchos otros aspectos.

“La estructura de gremios en animales se puede comparar con los gremios humanos, dedicados a distintos oficios. Por ejemplo, el gremio de los ferreteros que venden productos para la construcción. Entre los animales depredadores, ellos se dedican a la caza de presas de distintos tipos … en ese sentido forman un gremio o una unión dedicada a un mismo rubro”.

En este sentido, explica que existen diversos otros gremios animales, por ejemplo de consumidores de semillas, de frutos, etc. Asegura que entre ellos puede haber competencia o facilitación, principalmente para conseguir alimento.

Roedores y la agricultura

El especialista señala que la lluvia y los nutrientes son factores limitantes para el crecimiento de la vegetación en cualquier lugar natural. Pero una lluvia inusual generada por El Niño en un ambiente como el de la Región de Coquimbo, e inclusive con precipitaciones de sólo 15 mm, pueden generar una cadena de efectos que beneficiarían no sólo al ecosistema natural sino también a sectores productivos.

“El pulso que genera el agua de la lluvia, provoca un aumento de productividad que se eleva desde los niveles basales de vegetación y de los ratones que comen semillas, al ave rapaz que se come al ratón, hasta los niveles más altos de la cadena trófica. Por otro lado, la misma situación puede generar problemas al sector agrícola, mediante las ratadas, grupos de roedores que afectan a los cultivos”.

CEAZA

El científico comenta que fue un acierto la creación de los centros regionales de investigación, como el CEAZA, al alero del Programa Regional de Desarrollo Científico y Tecnológico del CONICYT, por el alcance que han demostrado estas instituciones.

“Nos quedamos cortos con lo que se proyectó para estos centros científicos, porque ahora tienen impacto nacional y reconocimiento internacional”.

La visita del Dr. Jaksic a la Región de Coquimbo fue organizada por la Universidad de La Serena (ULS), en el marco del “II Congreso Binacional de Investigación Científica Chile-Argentina”, oportunidad que aprovechó para realizar una charla a estudiantes de postgrado del Departamento de Biología de la Universidad de La Serena.

El Dr. Francisco Squeo, investigador de la ULS y del CEAZA, quien ha trabajado en múltiples proyectos con el nuevo Premio Nacional de Ciencias, manifiesta que es un honor tener al Dr. Jaksic en la zona y poder seguir investigando con él para aportar a la ciencia regional.