Una jornada marcada por la curiosidad y las ganas de aprender nuevos métodos de aprendizaje, fue la que vivieron estudiantes y docentes de escuelas de la Corporación Gabriel González Videla (CGGV). En la ocasión, Claudia Hernández, encargada de difusión científica del CEAZA e IEB, y Juan Seguel, coordinador de extensión del Observatorio Cerro Tololo (CTIO), realizaron un taller de Enseñanza de la Ecología en el Patio de la Escuela (EEPE), orientado a enseñar el método científico simplificado.
La iniciativa organizada por José Espinoza y René Milla, profesionales del área de Educación Curricular y Formativa de la CGGV, tuvo lugar en el recinto AURA y pretendía introducir a los alumnos de las escuelas en el tema de las ciencias. Asimismo buscaba que conocieran, de primera mano, el método científico como una herramienta de aprendizaje para que sea incluido en los procesos educativos tanto por los profesores como por los alumnos.
“Nosotros quisimos que los alumnos conocieran sobre el método científico a través de personas que realmente estén involucradas con la ciencia, por ello acudimos a Claudia. La idea era que ella los introdujera en este mundo y los preparara en primera instancia para lo que será la feria científica que estamos planificando para octubre”, señala Espinoza.
Milla por su parte precisa que “la idea nuestra es que a fines de octubre hagamos una muestra científica con todos los niños de la corporación, que forman parte de diez establecimientos escolares que están participando en este proyecto”, y agrega que “hemos visto que los niños de la corporación han estado muy motivados en estos talleres, e incluso han incentivado también a sus pares”
El taller se dividió en dos sesiones, en la primera, profesores y alumnos conocieron cómo realizar indagaciones en base a hipótesis y preguntas que pueden formularse observando el entorno escolar y utilizando las herramientas que este les proporciona. En la segunda sesión, cada grupo pudo desarrollar una pequeña investigación y descubrir en la práctica, lo fácil que puede ser desarrollar ciencia utilizando la curiosidad y los sentidos.
Claudia Hernández explica que el ciclo de indagación busca ser una herramienta pedagógica de la enseñanza de las ciencias para ser utilizada en el patio escolar y potenciar además, la ejecución de indagaciones propias de los estudiantes. “En estos talleres profesores y alumnos pudieron darse cuenta que para desarrollar ciencia no requieren necesariamente de instrumentos muy sofisticados, ni de un vocabulario muy rebuscado, sólo precisan de un poco de curiosidad, estar atento a su alrededor y usar todos sus sentidos para resolver las preguntas que surgen”, afirmó.
Fabiola Barahona, profesora de ciencias naturales del Colegio Quebrada de Talca, declara que “la actividad nos beneficia en términos de conocimientos porque somos profesores generalistas, la especialidad de ciencias no la tenemos. Esto nos ayuda en nuestros conocimientos y también para poder aplicarlos de mejor manera a los estudiantes”. La docente espera que el proyecto perdure en el tiempo y que no termine con la realización de la feria en octubre, para ir fortaleciendo el aprendizaje de este método científico adaptado a los estudiantes.
En tanto, María del Pilar Gutiérrez, profesora generalista del Colegio Alonso de Ercilla afirma que “de repente el método científico nos complica a todos, tanto a alumnos como profesores o docentes, y esta es una manera práctica y lúdica donde se van cuestionando las cosas de forma tangible, y donde además, se refuerza el uso de los sentidos, la reflexión y la curiosidad de los alumnos”
Por su parte, Katherine Cabrera, docente de biología del Colegio Arturo Prat Chacón dijo que “la experiencia me ha parecido extraordinaria, porque el tema del método científico es algo complejo de efectuar, pero gracias a los monitores hemos podido desarrollar un proyecto científico que podrá ser mostrado en una feria científica”.
La organización de estos talleres se enmarca en el programa de celebración del mes aniversario del centro científico CEAZA, por sus once años de realizar ciencia en la Región de Coquimbo.
El ciclo de indagación
El uso del ciclo de indagación en la enseñanza de las ciencias, es una propuesta metodológica que permite incorporar de primera mano, los conocimientos acerca del entorno que nos rodea, a partir de las características únicas y particulares de cada localidad.
Se trata de una simplificación del método científico que tiene tres pasos básicos: (1) la pregunta que surge de la curiosidad acerca de los que nos rodea, (2) la acción que lleva a prácticas simples para responder la pregunta y obtener resultados y (3) la reflexión de los resultados obtenidos y su extrapolación a ámbitos más amplios, lo que puede generar más preguntas.
Esta metodología permite la incorporación del conocimiento, siendo protagonista del propio aprendizaje, lo que conlleva al pensamiento crítico y a la toma de decisiones informadas y responsables acerca del medioambiente.
La aplicación del Ciclo de Indagación permite el desarrollo transversal del aprendizaje, al recurrir a las distintas disciplinas del currículo escolar en cada uno de sus pasos.
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